Después de haber estado internado por una bronquitis, el Sumo Pontífice celebró este domingo la eucaristía que abre Semana Santa, y pidió por los pobres y marginados.
El Papa Francisco celebró en la Plaza San Pedro la misa del Domingo de Ramos, en lo que fue su primera actividad pública tras recibir el alta por la bronquitis que lo tuvo tres días internado en un hospital de Roma.
Frente a más de 30.000 personas que colmaron la Plaza vaticana, el Sumo Pontífice pidió por los pobres y marginados, a quienes consideró “íconos vivos de Cristo”, durante la celebración que inicia las actividades de la Semana Santa.
Después de la misa y de rezar el Angelus del mediodía, el Papa agradeció junto al Altar las oraciones que los fieles realizaron por su salud durante estos días.
El Papa Francisco, de 86 años, fue internado de urgencia el pasado miércoles en el hospital Gemelli, debido a una bronquitis infecciosa. Tras recibir el alta, este sábado retornó al Vaticano y en un breve diálogo con la prensa, aseguró: “Solo sentí malestar y no tuve miedo, todavía estoy vivo”.
Fuente: Filo.news